Parece, sólo parece, que nuestro gobierno olvida que NADA ESTÁ ESCRITO SOBRE PIEDRA y que todo puede cambiar.
Este absolutismo en ciernes que amenaza nuestra sociedad no puede continuar.
«…Sólo tiene un nombre…«
¡No somos borregos, somos personas!
Tenemos capacidad de raciocinio para decidir, no necesitamos a nadie que nos coja de la mano para cruzar la calle. Estamos sufriendo un cambio hacia un sistema que aflorará lo peor de cada uno de nosotros.
El «cómo no puedo contra esta ley, me saco otra de la manga para pasarme la primera por el forro» sólo tiene un nombre…
¡Se llama DICTADURA!