Este maravilloso establecimiento nació de una
idea sobre el perfeccionismo.
Olvídense del concepto de hotel que tengan
preconcebido. Hablamos de un capricho
elegante que dispone de 22 habitaciones
pequeñas, medianas y grandes que lo tiene
todo pensado para la necesidad del cliente.
Hasta sus amenities son Dr. Harris que cómo
sabrán tiene tienda en el barrio de Mayfair
de London
Y es que nada más entrar en WITTMORE se respira con una hora de retraso… vamos que está usted en Londres.
Luces tenues con toques rojos en su decoración, que evocan a los selectos clubs privados de la capital británica.
Velas en las mesas de su restaurante CONTRABAN
que envuelven a los comensales en un ambiente que invita a desarrollar sensaciones… ¡todo es cool!
La Srta que me acompaña a mi mesa reservada tiene el tono de voz ideal para el local, todo está medido.
Con la música de un grupo de Jazz en vivo doy buena cuenta de unas ostras de Normandía, una ensalada César y un Bacalao confitado, el cual les recomiendo.
Todo es perfecto… la vida es maravillosa.
“Volverás, y tanto que volverás”, eso me repetí mentalmente cuando abandonaba caminando por las calles de barrio gótico de Barcelona las instalaciones de esta joya de cinco estrellas que es WITTMORE.